Día para recordar que empezó muy temprano y que acabo muy tarde, pero al que si tuviera que repetirlo, apenas le quitaría nada, porque fue casi perfecto.
Un día de ensayo y convivencia, aunque nuestros ensayos son siempre una gran convivencia porque bajo esas trabajaderas, todos tenemos grandes amigos y algunos, algo más que simplemente amigos. Yo debería de nombrar algunos de esos amigos aquí hoy, pero eso no es lo más importante, o sí, pero esta vez no lo haré porque ellos saben muy bien quien son.
Un ensayo en el cual, como manda ya la tradición, esperaba San Francisco, junto este año, a una gran muchedumbre, la cual yo creo que disfrutó tanto allí, como en el resto del ensayo. Hizo un día esplendido, un gran día de primavera, en el cual cuando abandonamos la plaza, de San Francisco, la Inmaculada que la preside, quedó sonriendo.
La comida que hubo después, que se alargó hasta bien entrada la noche, tuvo momentos de los que se tardan en olvidar, de risas, de cante, en los que se palpaba la gran familia que es esta Hermandad.
Un día presagio del gran Lunes Santo que nos espera, un día de "comentarios que ilusionan a uno para aguantar toda una vida."
/ Ensayo de Ntro. Padre Jesús de la
Oración en el Huerto de Linares 30.03.2014 /
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